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En el año 46 a.c. Julio César ofreció al pueblo de Roma un magno evento, en el que más de cinco mil prisioneros de guerra debieron pelear hasta la muerte. Estos espectáculos de guerra se conocieron como naumaquias y fueron célebres desde entonces durante el imperio romano, llegando a reunir hasta veinte mil combatientes. Antes de iniciar estas batallas, la multitud de condenados a muerte saludaban al emperador con la frase «Avē Imperātor, moritūrī tē salūtant». Hoy en día, los condenados continúan mirando al cielo, esta vez dirigiendo su plegaria hacia un emperador con el rostro oculto y esperando que el milagro de la providencia deportiva les salve de su destino inminente. El fútbol de hoy parece perpetuar esta frase de la antigua Roma al ser usado como escaparate de los victoriosos, que solo alcanzan la cima gracias a la montaña de cuerpos que son dejados en el olvido. Sin embargo, detrás de lo que parece ser un cínico legado romano de la muerte hecha espectáculo, reside también la potencia de un juego que deja entrever la ancestralidad de nuestros impulsos, ritmos y bailes primigenios.
Moritūrī tē salūtant es un díptico escénico formado por un solo de fútbol-danza protagonizado por el artista y exfutbolista colombiano Checho Tamayo y un documental escénico comunitario protagonizado por “no-actores” habitantes del barrio Pajarillos.
Con la colaboración de: Injuve, Comunidad de Madrid, Surge Madrid, Sala Baratza, Pajarillos Educa, Dragones de Lavapies y Pasoa2.
Co-producido por el Festival Meet You Valladolid.
ENTRADAS POR 5€ con la tarjeta Calderón Joven
- Dirección: Checho Tamayo & Camila Vecco Haddad
- Ayudante de dirección: George Marinov
- Intérpretes: Checho Tamayo & vecinos del barrio Pajarillos
- Textos: Camila Vecco & Checho Tamayo
- Música original y asistencia dramatúrgica: Sammy Metcalfe
- Coreografía: Checho Tamayo
- Diseño de iluminación: Geoge Marinov
- Diseño de vestuario y escenografía: Raíces Aéreas
- Producción: Olga Hernández & Raíces Aéreas
- Asistencia cinematográfica: Juan del Campo & Lucas Canosa
- Fotografías del dossier: Corina López de Sousa